La Policía Federal de Brasil confiscó este miércoles centenares de botellas de vinos argentinos de alta gama que habían sido ingresados de contrabando desde la Argentina y que se vendían a la mitad de precio del mercado, se informó oficialmente.
Los cinco allanamientos ordenados por la justicia de Campos de Goytacazes, interior de Río de Janeiro, fueron realizados por la Policía Federal y la Receita Federal, el órgano de recaudación fiscal brasileño, en domicilios y comercios de la ciudad balnearia de Macaé, uno de los polos petroleros más importantes del país.
Un comunicado de la Policía Federal informó que entre los vinos confiscados se encuentran las marcas argentinas DV Catena, Angélica Zapata, Álamos y Pulenta Estate, detalló.
El contrabando de vinos se ha transformado en uno de los negocios más rentables del crimen organizado en Brasil a partir de los pasos fronterizos fluviales y terrestres desde las provincias de Misiones y Corrientes.
«Según investigaciones realizadas por la Policía Federal de Macaé, Río de Janeiro, los vinos ingresaron a Brasil de manera irregular, sin la aprobación y control del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento», dice el comunicado.
También se constató la disparidad de precios entre los valores de venta de los vinos ofrecidos por las empresas investigadas y los cobrados por el mercado, con una desproporción que corresponde, en promedio, al 50% del monto normalmente cobrado en el mercado del vino, agregaron las fuentes
La Policía Federal bautizó la redada como Operación Estafilo, en referencia al hijo de Dioniso, el dios del vino en la mitología griega.