En un trágico accidente laboral ocurrido el miércoles por la mañana en la localidad de Los Berros, Pedernal, un trabajador de 34 años, identificado como Oro, perdió la vida cuando una pared de un horno calero clandestino, conocido como «horno criollo», se desmoronó mientras realizaba sus tareas.
El horno operaba sin las condiciones mínimas de seguridad y alcanzaba temperaturas de hasta 950°C. Luego del colapso, una máquina topadora tuvo que ser utilizada para retirar el cuerpo del joven trabajador, que cayó al interior del horno tras el derrumbe de la pared frontal. Testigos del lugar relataron que Oro estaba trabajando cuando la estructura cedió, sin posibilidad de reaccionar.
Las autoridades detuvieron a un hombre de apellido Romero, quien sería el propietario del horno y está acusado de operar sin los permisos correspondientes, poniendo en peligro la vida de sus empleados. Tras el incidente, la Unidad Fiscal de Investigación ordenó la clausura y demolición de los hornos clandestinos de la zona.
Este trágico hecho expone nuevamente la crítica situación de informalidad en la producción de cal en San Juan, donde las condiciones laborales son precarias, sin regulaciones que protejan a los trabajadores, quienes a menudo se enfrentan a riesgos inminentes en su jornada diaria.