Analizan posible sanción a Julián Gil tras condena por encubrimiento en casos de abuso sexual

Tras la condena de Julián Gil, exintendente de Caucete y abogado, por encubrimiento agravado en dos casos de abuso sexual, el Tribunal de Disciplina del Foro de Abogados se prepara para evaluar su habilitación para ejercer la abogacía. El pasado viernes, en horas de la siesta, Gil fue condenado a un año de prisión en suspenso luego de admitir su responsabilidad en un juicio abreviado. Los delitos que se le imputan están relacionados con su intento de sobornar a las víctimas para favorecer a sus clientes, presuntos abusadores.

El Tribunal de Disciplina aún no ha tratado el caso, ya que se reúne semanalmente los viernes por la mañana, y la audiencia de formalización donde se acordó la condena de Gil se celebró en la tarde del 23 de agosto. En la próxima reunión del Tribunal, prevista para el viernes, se discutirá si se debe iniciar un proceso para evaluar la posible sanción disciplinaria del abogado.

Según el procedimiento habitual, el proceso puede iniciarse por denuncia o de oficio. Durante la reunión del Tribunal, se expondrá la situación de Gil y, de considerarse necesario, se solicitará un informe al organismo oficial que intervino en el caso (en este caso, el juez de Garantías). Este informe, junto con las copias certificadas de las actuaciones, se añadirá al expediente. Si el Tribunal decide que el caso es pasible de sanción, otorgará al abogado el derecho a defenderse y a presentar pruebas. En función de esta defensa, el Tribunal decidirá si archiva la causa o continúa el proceso.

Las posibles sanciones disciplinarias están establecidas en el artículo 79 de la Ley Provincial 127 A e incluyen un llamado de atención, una multa, suspensión del ejercicio profesional por hasta un año, o exclusión de la matrícula. La exclusión de la matrícula se aplica solo en casos graves, como cuando el abogado ha sido suspendido tres veces por el Tribunal de Disciplina o ha recibido una condena judicial firme que afecta el decoro y la ética profesional.

Si el Tribunal decide aplicar una sanción, Gil tiene la opción de recurrir a la justicia para impugnar la resolución. Dado que Gil admitió su culpabilidad y acordó la condena, se considera clave la próxima reunión del Tribunal de Disciplina del Foro de Abogados para determinar si se le aplicará alguna sanción que afecte su ejercicio profesional.

Este caso ha generado gran polémica en la comunidad jurídica, ya que pone en cuestión la ética y la conducta profesional de los abogados. La decisión del Tribunal de Disciplina será fundamental para establecer un precedente en la gestión de casos de mala praxis profesional y para mantener la confianza en el sistema de justicia.